Mi nuevo colegio…

Como todos los años por estas fechas, o un poco antes, dependiendo de la carga inicial de trabajo, escribo una nueva entrada para hablar del colegio que me ha tocado en suerte. Y esta vez, la suerte ha sido mucha.

El centro en cuestión es el colegio bilingüe “Ciudad de Córdoba”, situado en una de las mejores zonas de la Ciudad de los Ángeles, que ya de por sí es mi barrio favorito dentro de mi distrito, el de Villaverde, y donde probablemente acabe viviendo en los próximos años. El colegio me gusta, no sólo por la cercanía, pues podría incluso ir andando desde mi casa en poco más de media hora, sino por el ambiente escolar, en el que me he sentido muy a gusto desde el primer día. Además, al contrario del curso pasado, en el que estuve en tres colegios diferentes, aquí estaré todo el curso, evitando el trastorno que siempre suponen estos cambios para maestros y alumnos.

De nuevo, considero que he tenido mucha suerte con mis compañeros. Como siempre, me refiero a todos, desde las conserjes hasta el equipo directivo, pasando por todos los maestros, con quienes voy a compartir otro curso que espero sea maravilloso.

En este curso soy tutor de un grupo de 6º, el B, y maestro de las asignaturas en inglés de éste y del otro grupo del mismo nivel, del que es tutor mi compañero Ángel, y con quien comparto no sólo algunas aficiones, sino también algunos principios educativos importantes. Me refiero, fundamentalmente, a la visión pluridisciplinar a la hora de enseñar y motivar a nuestros alumnos, independientemente de la asignatura que estés trabajando. En distintos artículos de este blog, he hablado de este tema y de la importancia que considero que tiene para que se produzca un aprendizaje significativo. 

A modo de ejemplo, como ya les dije a los padres que asistieron a la primera reunión, cuando les expliqué a mis alumnos cómo funcionaba el sentido de la vista y se lo narré también en la pizarra de forma gráfica, aproveché para explicarles lo que eran la cámara oscura y la cámara estenopeica, para que vieran su simplicidad y paralelismo con el funcionamiento del ojo humano. Además, les enseñé varias fotografías realizadas por mí hace años con una cámara estenopeica, con sus correspondientes negativos. Haré este tipo de cosas a menudo; siempre que pueda, con el fin de ayudarles a anclar conceptos importantes de una manera más interesante y permanente.

En la siguiente entrada explicaré la nueva utilidad que voy a dar al blog durante el presente curso, como complemento didáctico para mis alumnos.

Un cordial saludo.